La expulsión de los Jesuitas de Pontevedra a través de los fondos bibliográficos del Museo

29/07/2014
Museo de Pontevedra

En este artículo, complementario de la exposición De templo jesuita a parroquial de San Bartolomé se muestran las publicaciones más representativas que se conservan en el Museo relativas a la expulsión de la Compañía de Jesús de Pontevedra durante el reinado de Carlos III, quién el 27 de febrero de 1767 firma la Pragmática Sanción que “extraña a los jesuitas de todos sus reinos.

Se hace una referencia especial a aquellas que están más relacionadas con los escritores y jesuitas vinculados a la ciudad de Pontevedra en donde, en la segunda mitad del s. XVII, la Orden había fundado un colegio y había iniciado la construcción de su iglesia que se consagraría en 1714.

Entre los fondos bibliográficos que se reseñan cabe mencionar La pragmática de Carlos III promulgada el 1 y el 3 de abril del mismo año, por la que se expulsa a los Jesuitas de España y sus posesiones.

Las obras de los jesuitas P. Isla y Padre Amoedo Carballo, el primero autor de Fray Gerundio de Campazas, obra que alcanzó gran éxito editorial y fue denunciada cinco veces en seis meses a la Inquisición que prohíbe su impresión por criticar el lenguaje empleado en los sermones por las órdenes religiosas y que en especial los dominicos no supieron encajar.

El segundo por su obra Carmen Patrium sive Pontevedra , escrita en el exilio de Bolonia, en la que hace una loa a su ciudad y que otro pontevedrés, Xoán Manuel Pintos, un siglo después, traduce de forma libre al gallego.

El relato de Claudio González Zúñiga, considerado uno de los pontevedreses más cultos del momento, que nació en 1784, poco después de la expulsión, y que conoció por relatos directos lo que ocurrió en Pontevedra.

Una Real Provisión de Carlos III, prohibiendo entrada de escritos en España en defensa de la Compañía.

Una Real Cédula de 1797, por la que se crea la superintendencia general de Temporalidades para España e islas adyacentes. Esto es, la gestión de todas las propiedades y rentas eclesiásticas que poseían los jesuitas.

Un Memorial redactado por ex-jesuitas, publicado en Santiago en 1812, en el que se explican las razones por las que la Compañía debe ser restaurada y se solicita la creación de un tribunal con el que se haga justicia.

También se muestra el mejor estudio de conjunto realizado hasta el momento sobre los jesuitas gallegos, de la mano del Padre Rivera Vázquez y la primera edición, impresa en 1977, del Dictamen que en 1766 emite el fiscal Rodríguez Campomanes y que es la base jurídica en la que se va a sustentar todo el proceso de extinción de la Compañía.

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Ana Barbazán Iglesias